Problemas más comunes del pecho

A los pezones pueden aparecer puntos o ampollas al pezón. Vamos uno por uno porque no tienen nada a ver.

Ampollas:

Del mismo modo que cuando llevas unos zapatos nuevos o pequeñas el rozamiento del pie con el zapato puede producir un levantamiento de la epidermis que se llena de líquido, el mismo pasa cuando una criatura no está muy cogida al pecho. El pezón roza con el paladar y el paladar actúa de “zapato”. Este rozamiento debido a una mala postura produce una ampolla normalmente a la cara del pezón.

Y del mismo modo que las ampollas de los pies hacen daño cuando te vuelves a poner el zapato, las que salen al pezón hacen daño cada vez que la criatura mama.

Sería conveniente revisar por qué razón se han hecho y rectificarla si es posible, porque si no lo hacemos las ampollas irán apareciendo y desapareciendo sin fin.

Una vez localizada y controlada la causa, vamos a solucionar la ampolla, podemos hacer dos cosas:

  1.  No hacer nada. Esperando que en pocas succiones o pocos días la piel se abre y salga el líquido y se desprenda la piel.
  2. Abrirlas. Con una aguja estéril y siempre por un lateral se pueden pinchar para evacuar el contenido.

Tanto si seguís un plan como otro hace falta que las horas y días posteriores limpiáis tres o cuatro veces al día el pezón afectado con un jabón neutro y mucha agua. Dejáis el pecho al aire todo lo que os sea posible para favorecer la cicatrización y evitar que se infecte.

Puntos rojos (con sangre):

Acostumbran a ser muy pequeños, aparecen a la cara del pezón, son irregulares y claramente están bajo la piel, como retenidos. Este tipo de punto es causado por una succión demasiado intensa o por una compresión con las encías o los dientes, que produce una pequeña hemorragia que queda retenida detrás los poros del pezón.

Estos tipos de puntos pueden modificar su color a medida que pasan las horas y los días: son de un color rojo intenso las primeras horas, después se oscurecen hasta llegar a ser negras y posteriormente, y cómo si fuera un hematoma a la piel, se van “diluyendo” en una tonalidad amarillento.

Estos puntos producen dolor porque colapsan la salida de parte de la leche por el pezón, el que se puede traducir en un dolor penetrante, intenso, cuando la criatura succiona.

Estos tipos de puntos es mejor no manipularlos ni intentar pinchar los, porque al ser profundos la situación de dolor puede empeorar si los incordiamos. La molestia durará unos días hasta finalmente desaparecer.